He visto que algunos de los blogs que visito han cerrado por vacaciones. En algunos casos, me parece una canallada. ¡Cómo pueden hacerme eso! Las propuestas más interesantes que recibo en la actualidad están en los blogs, en algunos de ellos.
Pero bueno, esto me ha recordado un chascarrillo que cuentan los viejos del pueblo. Había un churrero en la calle Amesti que después de unos años instalado, como el negocio no prosperaba, cerró y colocó un cartel: "Adiós, Algorta querida, me voy por aburrimiento".
Y el zapatero remendón del barrio cerró el chiringuito hace unos cinco o seis años y alguien colocó un cartel en la persiana: "Cerrado por depresión".
2 comentarios:
En un bar de mi barrio se les fue la olla. Pusieron: "Cerrado por vacaciones. Gracias por las molestias".
O el cura gandul de aquel chiste malo, que en Jueves Santo cerraba la parroquia "por defunción".
¿Perdonen las disculpas?
¿Es eso?
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