Los iconos tienen sexo y los de arriba son sexistas. La primera es de una calle peatonal de Las Arenas, la segunda de las rampas de Salsidu, inauguradas este año.
Y como soy buena persona, os pongo aquí el enlace a una discusión que mantuvimos en noviembre de 2006, por si alguien hace un comentario que se contradiga con lo que dijo entonces. Hala.
Gracias, I.
2 comentarios:
Parece una nimiedad pero no lo es, porque ese tipo de expresiones que pasan desapercibidas actúan fortaleciendo sin que nos demos cuenta los roles sexistas. Ahora más que nunca, que el Gobierno vasco se ha mojado con acierto en impulsar el Programa Gizonduz de políticas de igualdad dirigidas a hombres, los alcaldes del PNV tendrían que cuidar especialmente esos detalles y promover modelos positivos de masculinidad, como el del padre comprometido.
He recordado aquella discusión pero este caso es distinto. Si no recuerdo mal, y tomando riesgos porque no he pinchado en el enlace a aquella historia, yo entonces decía que el icono básico para representar a las personas no es hombre ni mujer, que vale para ambos, y que por eso me parecía bastante tonto ponerles faldas a los muñecos de los semáforos.
Aquí uno de los iconos se identifica expresamente como mujer (la falda, si no me equivoco, la suelen usar las mujeres) y siempre es una mujer la que aparece con niños, mientras que el hombre se escaquea para ir a comprar el Marca (véase primera señal).
Así que venga, a cambiar las señales.
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