sábado, abril 01, 2006

Pisos patera


Se está extendiendo en los medios de comunicación de España la locución 'pisos patera'.
Hace referencia a viviendas en las que se hacinan inmigrantes: uno sobre otro, comparten domicilio a turnos de ocho horas, llegan a la cama caliente de otro (a veces, la comparten por cansancio o extenuación del anterior inquilino), pagan cantidades inaceptables e insufribles por un triste habitáculo en que caerse muertos. Son víctimas de una cruel especulación.
Es una situación humanamente terrible.
Las pateras son pequeñas embarcaciones en las que consiguen acercarse a la península. Salen de cualquier lugar de África con la incertidumbre de llegar a buen puerto. Pocas veces lo consiguen. Las estadísticas son muy desalentadoras. Una vez alcanzado el 'objetivo', se ven abocados a repetir su futuro.Y navegan a la deriva en esos pisos 'patera'.Creo que la expresión de 'piso patera' es un acierto descriptivo, pero duele en el alma que encuentren un futuro peor que la situación que sufrían en sus países de origen.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Lucía, los pisos-patera son para los especualaores de viviendas una vuelta de tuerca más lucrativa de los pisos para estudiantes. El sistema es el mismo: meter el máximo de gente en el mínimo de superficie elevando el precio todo lo que los alojados estén dispuesto a pagar. Y, como donde duermen diez duermen quince, los precios acaban siendo llevaderos aunque se pongan por las nubes. La palabra patera (que antes era la embarcación de mariscadores y de pescadores de bajura) se ha envilecido hasta convertirse en un símbolo de la infamia humana. Estos pisos pueden perfectamente adoptar la misma denominación porque hablan de la mismamiseria.

Anónimo dijo...

JMR:
Tu reflexión me parece acertada. No obstante, respecto a tu comparación, yo no diría que el sistema sea el mismo ya que con los inmigrantes, los arrendatarios se olvidan de su derecho a la dignidad. Estoy convencida de que ni el estado de las viviendas, ni el trato a los inquilinos, ni las condiciones de vida y derechos de unos y otros son comparables.
Así pues, no creo que sea una vuelta de tuerca sino más bien el ansia de lucro de unos pocos convertida en depravación.

 
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