Un titular de ayer: Más de 90 millones de viajeros usaron el creditrans el año pasado en Vizcaya.
No es necesario leer la información para saber que, en realidad, no se trata de 90 millones de personas diferentes viajando una única vez. Hay una ligera, solo ligera, exageración en la redacción del titular. No se sabe cómo han hecho las cuentas: ¿Con la tarjeta de prepago se han realizado 90 millones de traslados o se han vendido 90 millones de tarjetas?
No es necesario leer la información para saber que, en realidad, no se trata de 90 millones de personas diferentes viajando una única vez. Hay una ligera, solo ligera, exageración en la redacción del titular. No se sabe cómo han hecho las cuentas: ¿Con la tarjeta de prepago se han realizado 90 millones de traslados o se han vendido 90 millones de tarjetas?
La lectura del texto no lo aclara. Es más, produce otra perplejidad: El medio de transporte en el que se registra el mayor uso del billete es en Bilbobus, con un 75% de usuarios, seguido de Euskotran (69%), Bizkaibus (67%), Metro Bilbao (52,5%) y Puente Colgante (41,8%). En el lado contrario de la balanza se sitúa Feve, que apenas registra un 27% de los pagos a través de este sistema.
Sumadas todas las cifras supera con mucho el 100%, porque los datos están referidos al porcentaje de viajeros de cada servicio que usa la tarjeta. Pero se podría haber pensado, como yo lo he hecho, que nos iban a decir el tanto por ciento de viajes de creditrans que corresponden a cada compañía. O sea, que la referencia no es cuántos usuarios de Bilbobus usaron la tarjeta, sino cuantos usuarios de la tarjeta usaron Bilbobus.
Si leemos la información, sabemos muchas más cosas: Por ejemplo, que la mayoría del personal prefiere comprar una tarjeta de 5 euros y los menos usan la de 15. Pero nadie nos dice qué beneficio obtenemos de usar la tarjeta: ¿Nos salen más baratos de verdad los traslados?, ¿qué porcentaje ahorramos, por ejemplo, en un trasbordo de metro a bus, o de una línea de bus a otra? ¿Cuánto dinero tiramos en tarjetas que adquirimos pero no llegamos a usar porque caducan o las perdemos? ¿Cuántos viajeros comparten la tarjeta en un mismo traslado?
Habrá quién se pregunte para qué sirve toda esta disquisición. Yo también me lo pregunto. Pero si el periodista no se hace esas preguntas a sí mismo, ¿cómo va a formularlas en la rueda de prensa que ha servido para presentar esos resultados?
5 comentarios:
Pues sí, estoy de acuerdo,deja todo eso en el aire, y lo de los 90 millones no hay por dónde cogerlo. Lo más probable es que sean creditrans vendidos. Yo compro uno como mínimo a la semana así que... El ahorro que supone es también un dato importante, y tal vez explicar porqué el metro si es uno de los medios de transporte más utilizados está abajo de la lista en uso de creditrans (la respuesta seguro que es que el metro ofrece otros bonos).
En cuanto a los que caducan, eso me ha recordado a cercanías Renfe en Madrid. ¿Te puedes creer que el bono de diez viajes caduca apenas en una semana y cuando éso ocurre no te devuelven el dinero? Cuánto tenemos que soportar las usuarias del transporte público...
Te podías ofrecer para hacer un estudio serio... Ya casi lo has hecho.
Jajajaja...noventa millones...jajaja. Y luego dicen que los vascos sois exagerados...jajaja. Es broma.
Tampoco es tanto exagerar. Vamos a suponer que son 150.000 usuarios del transporte público (para el Gran Bilbao es muy poco, el 15%); que hacen un viaje diario durante 10 meses al año:
Ya estamos en 90 millones de traslados. Y con solo una ida y vuelta de casa al curro.
Bueno, creo.
Claro, pero esa es la cuestión, que si la cifra es de usuarios es imposible, pero si es de traslados o de número de creditrans vendidos es razonable. Oye, ¿por qué en tu blog hay que meter código de seguridad y en el mío no? ¿Lo has elegido tú? ¿Y si es así, por qué?
Publicar un comentario